Nuevos perfiles, nuevas competencias

Las personas que nos dedicamos a Recursos Humanos hemos de actualizarnos constantemente en los perfiles que se demandan en nuestras empresas y sobre todo si estas como en mi caso son tecnológicas.

En los últimos años, a la complejidad habitual de los perfiles de Telecomunicaciones y IT, se han sumado las nuevas habilidades y conocimientos que se requieren en el área de Big Data, Inteligencia Artificial, Machine learning, etc.

En la actualidad estoy reclutando perfiles muy actuales  y complejos como:

  • Científicos de Datos, con experiencia en modelaje de datos, desarrollo en tecnologías Java y Big Data.
  • Consultores Agro TIC, es decir, personas graduadas en  Ingeniería Agronómica o  agrícola pero además con conocimientos o al menos mucho interés en el mundo de la informática y los datos.

También seguimos contratando los perfiles habituales de IT como:

  • Programadores PHP
  • Programadores Java
  • Consultores ERP

Pero sean más actuales o menos, más difíciles de conseguir o no, personalmente lo que más me interesa cuando incorporo a un profesional a un proyecto, es que traiga en la mochila competencias esenciales que se suelen llamar “soft skills” pero que para mí son claves.

También esas competencias clave están cambiando bastante. Antes buscábamos  profesionales orientados al resultado y hoy buscamos más la orientación al proceso.

Si queremos tener impacto en los entornos de trabajo, independientemente del rol, de la experiencia o del nivel profesional, hemos de ser capaces de vivir el día a día del proyecto, sirviéndonos del resultado esperado simplemente como una manera de empezar con un fin en la mente y ayudarnos en nuestro cotidiano.

Hay competencias para vivir el día a día como

  • Responsabilidad y capacidad para trabajar en entornos diversos, no estructurados en los que has de tomar decisiones ágiles, saber equivocarse rápido y corregir más aún.
  • Abiertos al cambio. Que podamos manejarnos en entornos rápidos e inciertos para todos.
  • Que nos guste aprender constantemente y que nunca creamos que somos demasiado mayores o expertos para hacerlo.
  • Flexibilidad cognitiva y emocional. Saber controlar nuestras emociones, gestionar nuestros estrés y respetar a todo el equipo.
  • Tenacidad y resistencia a la frustración.
  • Que no nos de miedo la tecnología, pero que hagamos lo posible por entenderla e integrarla con coherencia en nuestros trabajos.

Y podría seguir poniendo algunas más, pero ese es un buen puñado de habilidades que todos hemos de desarrollar.

Hay un libro muy interesante y recomendable “The Human Brand” escrito por Chris Malone y Susan T Fiske, cuya tesis muy resumida, es que hoy en día triunfan las empresas que reúnen lo que ellos llaman “Calidez y Competencia”, entendiendo que Calidez son todas esas habilidades humanistas sin las cuales, por muy buen producto o servicio que vendamos, no tendríamos éxito en este mercado en el que las reglas de juego han cambiado.

Te recomiendo su lectura así como una reflexión sobre cómo la tecnología está cambiando la perspectiva de la captación del Talento en nuestras empresas. Y en concreto en el sector agroalimentario.

¡Gracias!

Inma Trapero